viernes, 10 de agosto de 2007

Khajuraho

A-co-jo-nan-te. Lo de hoy ha sido sencillamente a-co-jo-nan-te. Acabamos de volver al hotel y estamos emocionados. Pero vamos por partes.

Por la manhana, despues de haber dormido como cinco horas (mi record en los ultimos tres o cuatro dias) Rajesh nos llevo al aeropuerto en su jeep. Habia tantos atascos en el rio del trafico que pensabamos que no llegabamos a tiempo, pero por suerte nuestro vuelo estaba retrasado. Fue un autentico vuelo con escala, como si fuera un autobus. Primera parada: Varanasi (Benares). Segunda: Khajuraho. La nuestra.

El aeropuerto de Khajuraho tenia mayor proporcion de espanholes que el de Barajas sin duda. Al salir nos asaltaron los taxistas, todos chapurreaban espanhol. Ibamos con tantas ganas de ver los templos de Khajuraho y de recuperar el retraso que al hotel llegamos literalmente corriendo, o casi. Al menos, a paso de marcha atletica, a pesar de los mochilones y el calor bestial del mediodia. Cogimos las habitaciones, tiramos las mochilas, algunos se cambiaron de ropa y pedimos un par de rikshas (he decidido utilizar esta transcripcion en lugar de la inglesa "rickshaw", pues se parece mas a como lo pronuncian ellos) y nos fuimos a ver los templos de Kandariya Mahadev.

El complejo es alucinante. Se compone de varios templos (cuatro o cinco) que de lejos, para que os hagais una idea, se asemejan un poco a los de Angkor Vat, en Camboya. Ya entrar en el recinto impresiona. Pero de cerca es mucho mas flipante. Cada templo esta cubierto de cabo a rabo de relieves detalladisimos con escenas de la vida cotidiana (de la de hace mil anhos, claro, no de la de ahora), desde una chica mirandose al espejo u otra quitandose una astilla de un pie hasta batallas con caballos y elefantes, pasando por imagenes de dioses del panteon hindu. Pero lo que mas llama la atencion (no solo a mi, ?eh?) son las representaciones kamasutricas. Son de un erotismo sin pudor alguno, como corresponde a una religion que, en principio, admite el lugar fundamental que la sexualidad tiene en la vida de la gente (aunque eso hoy en dia parezca haberse perdido en la cotidianeidad de la India, que no ve con buenos ojos las muestras de afecto en publico). Algunas imagenes son realmente impresionantes, como las de una mujer en accion con cuatro hombres, las de mujeres acariciandose los pechos mientras observan la escena representada en otro relieve, etc. Espero poder poner fotos pronto, porque en este pais hay internet por todas partes, pero lentisima; y conseguir un lector de tarjetas es poco menos que una hazanha. Lo siento, porque me encantaria poder compartirlas con vosotros ahora mismo. Yo me tire como tres horas dando vueltas por alli y haciendo fotos (en total mas de doscientas!). Menos mal que me compre la reflex con dos objetivos, porque sin un buen zoom muchas veces no habria podido hacer las fotos que he hecho. Es mas, algunas veces ni habria alcanzado a ver los relieves mas altos. Los demas, como no hacian tantas, se me perdieron pronto. Quedamos a la salida.

Al salir resulto que mi hermana se encontraba mal (nada grave, papa, no te preocupes) y parte del grupo se habia vuelto al hotel, asi que, deshaciendonos de los enjambres de vendedores que nos asaltaban (todos hablaban un poco de espanhol y algunos un bastante, cosa que, vista la cantidad de espanholes que pululaba por alli, casi ni me sorprende), encontramos a nuestro condu de riksha y pusimos rumbo al hotel. El condu, que se llamaba Ganesh (si, como el dios hindu), habla bastante bien el ingles (dice que lo ha aprendido mediante el contacto con los turistas) y nos parecio muy majo. Supongo que nosotros a el tambien, porque nos propuso invitarnos a su casa. La idea nos parecio genial y quedamos para despues de la cena.

En el hotel nos duchamos (mi sudada de hoy batio todos los records), nos cambiamos de ropa, cenamos algo (mucha gente, espaguetis, pues sus estomagos no soportaban mas especias; yo, por supuesto, comida india, mmm!) y, no se si por puntualidad espanhola o por error de calculo o por la increible lentitud de la restauracion india, tuvimos al pobre Ganesh esperandonos casi una hora. Pero al final (con la excepcion de mi hermana, que prefirio (es un decir) quedarse en la habita, partimos rumbo a la casa de Ganesh. Siete personas en una riksha, contando con el. Si no sabeis lo que es una riksha, pues no es mas que una moto cubierta con varias ruedas. C'omo fue posible que semejante vehiculo destartalado nos transportara a los siete (que, ademas, aparte de Ganesh, no somos precisamente pequenhitos), no lo se. Ibamos tan emocionados que nos pusimos a cantar nuestra cancion favorita estos dias, "vamos de paseo en un auto nuevo", o "feo", segun la version de cada uno, y Ganesh se partia de risa. En un momento del camino, en medio de la nada, dijo que habia un "problem" y paro. En aquel momento se me paso por la cabeza que quiza estuvieramos locos al meternos asi como asi en el vehiculo de un tipo que, cierto es que no tiene ni media hostia, pero que podria llevarnos adonde quisiera. Sin embargo, estabamos tan de buen rollo que no nos preocupamos lo mas minimo. Mientras Ganesh echaba gasolina al cacharro nos pusimos a hacernos fotos.

Arrancamos de nuevo, nos metimos por calles sin asfaltar, sin iluminar. Llegamos ante una casa que casi ni se veia de lo oscuro que estaba aquello (eso si, en el cielo las estrellas se veian de maravilla). Nos recibio la familia en pleno con el maximo respeto y la mejor sonrisa; nos dijeron que no hacia falta que nos quitaramos los zapatos a pesar de que ellos los habian dejado a la entrada; nos trajeron todas las sillas que encontraron y ellos se sentaron en el suelo (yo al final, a pesar de los trillones de microcucarachitas que pululaban por alli y se me acabaron subiendo por dentro de la ropa, tambien lo hice, ya que no queria estar a un nivel superior); nos ofrecieron masala chai, o sea, te con leche y especias, que, por una vez, aceptamos sin plantearnos si estaria hecho con agua embotellada o no (seguro que no, pero confiamos en que eso no nos pase factura; estaba muy bueno, por cierto); el sobrino de Ganesh, Amar, que tendria unos diez u once anhos, trajo la tabla (no, la tabla de cortar el pan no, la de lavar la ropa tampoco: un instrumento de percusion indio que suena de maravilla y exige una tecnica endemoniada, si alguien no sabe lo que es, que busque "Indian tabla" en imagenes de Google) y se puso a tocar (!!!alucinante, que bueno el crio!!!) mientras su hermanita y el resto de la familia cantaban y daban palmas, y alli nos improvisaron un concierto que nos dejo boquiabiertos y ojoplaticos. El chavalin mas pequenho, calculo que de cinco anhitos, para no ser menos, hizo el pino con la cabeza en el suelo, a lo que yo le respondi inmediatamente haciendo lo mismo (pero con las piernas encogidas para no mutilarme con el sempiterno ventilador del techo), cosa que hizo reir a la familia; quizas un indio adulto no haga esas cosas. Luego estuvimos conversando sobre diferentes temas; tanto Ganesh como su hermana (!se parecen un monton!) hablaban bastante ingles; y Amar, tampoco le daba nada mal. Para agradecerselo de algun modo, nosotros nos pusimos despues a cantarles canciones gallegas (yo, por aquello de no hacerlo solo a cappella, me puse a aporrear la tabla a modo de bombo para acompanhar). Les cantamos el "bailaches Carolina", el "eu chorei, chorei o domingo a tarde"; Javier entono un "estan as ruas chorando" que me puso los pelos de punta; luego Carla y yo nos arrancamos con el "volver" de Gardel; y, para terminar, todos juntos les cantamos "apaga o candil", ya como despedida. La verdad es que estabamos tan a gusto que nos habriamos quedado mas, pero aquella gente se levanta temprano para trabajar y preferimos dejarlos descansar. He prometido mandarle las fotos a Ganesh. La verdad es que cuando lo hice no sabia que el no tiene direccion electronica, pero pienso enviarselas, porque se las merecen.

Asi que, ya digo: el dia empezo como una tipica jornada turistica con visita a templo y andanadas de fotos, pero ha acabado de forma soprendente. Cada vez nos sentimos mas a gusto aqui y hay quien ya se ha propuesto volver el anho que viene o incluso venirse una temporada con alguna ONG. A mi, la verdad es que si esto sigue asi pienso volver. Tengo claro que habra momentos chungos, pero de momento la tonica general esta siendo muy, muy buena. Y ya vamos venciendo el problema principal, que era el asco. Tambien es cierto que el hotel en el que estamos ahora no tiene naaaaada que ver con aquel en el que nos encontramos nada mas llegar, en medio de la noche, rodeados de miseria urbana. La miseria rural que hemos visto hoy da la sensacion de ser mas humana.

Manhana por la manhana hemos quedado con Ganesh otra vez para que nos lleve a unas cataratas que hay por aqui cerca y despues nos vamos a Varanasi. Se que alli nos enfrentaremos a una pobreza igual o superior a la que hemos visto en Delhi. Asi que ya os seguire contando.

Ahora me voy a dormir, que falta me hace. No sin antes comprobar que no queda ninguna microcuqui paseando por mi cuerpo. Por cierto, que estaran muy acostumbrados, pero la hermana de Ganesh, cada vez que una la tocaba, se la quitaba con menos tranquilidad de la que cabria esperar; es mas, con un escalofrio como los que nosotros mismos sufrimos en esos casos. Curioso.


FOR THOSE OF YOU WHO CANNOT READ SPANISH:
I know I promised to post some photos, but unfortunately it seems that broadband internet is unavailable here, not to mention card-readers, etc. Yesterday I managed to upload five pics onto my Flickr account. You can find a link to it on the right side of this site. Just click on "Mis fotillos". I hope you like them and I'll do my best to include some more as soon as I can. I hope I can find a good internet cafe in Varanasi these days. Cheers!

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